Bueno, pero voy al episodio al que me refería al principio de este post. El caso es que Guillermo de Baskerville encuentra un pergamino en el que al acercarlo por accidente a la llama de una lámpara aparecen unos signos borrosos de color amarillo oscuro y, más tarde, al desplazar la lámpara por detrás del folio, éstos se van definiendo poco a poco más claramente. Por tanto, tal y como decía al principio, en este episodio se ve involucrada la esteganografía, de una forma muy recurrente en relatos de misterio, aventuras, etc.: un mensaje escrito con tinta invisible que sólo reaparece al aplicarle calor (ver este post donde explico el sistema esteganográfico empleado por Edgard Allan Poe en "El escarabajo de oro" y que es el mismo que se usa en esta novela).
Por cierto, como curiosidad adicional y ejemplo de uno de los muchos detalles que se me escaparon en su momento, cuando Guillermo de Baskerville pasa la lámpara por detrás del pergamino y van apareciendo esos extraños signos, Adso de Melk dice: "Poco a poco, como si una mano invisible estuviese escribiendo “Mane, Tekel, Fares”. ¿A qué se refiere? Pues creo que, sin ninguna duda, a uno de los pasajes más antiguo que se recuerdan sobre un mensaje misterioso, que se relata en el capítulo V del Libro del profeta Daniel de la Biblia: durante un banquete que celebra el rey Baltasar de Babilonia, una mano sobrenatural escribe en la pared, con caracteres hebraicos, un mensaje misterioso: MANE, TECEL, FARES. Nadie salvo Daniel puede interpretarlo. Pero esto es ya otra historia.En esta ocasión me voy a permitir una licencia, ya que me voy a referir a un código que aparece en la novela "El nombre de la rosa" ('Il nome della rosa') de Umberto Eco. Y digo esto porque voy a contar un episodio de la misma que no se refiere a la criptografía, sino a la codificación de caracteres, y, aunque también tiene algo de esteganografía, ni siquiera se puede decir que sean parte esencial de su trama. Este papel le corresponde a la semiótica, es decir, a los símbolos y los signos que comunican un mensaje que debe ser interpretado por el receptor, materia en la que el filósofo y escritor italiano era todo un experto.
Tanto la novela, publicada en 1980, como su adaptación al cine, de 1986, tuvieron un gran éxito: un fraile franciscano Guillermo de Baskerville, papel interpretado en la película por Sean Connery, y el novicio benedictino Adso de Melk, interpretado por Christian Slater, investigan una serie de asesinatos que se producen en una abadía del norte de Italia.
Yo, seguro que al igual que muchos de los lectores de este blog que ya tenemos una cierta edad, vi la película en cuanto salió y, como me gustó, poco después leí el libro, pero fue hace mucho tiempo y no recuerdo bien ni la una ni el otro, además de que era muy joven y seguro que se me escaparon muchos detalles, por lo que tengo pendiente hacer ambas cosas de nuevo.
Volviendo al mensaje con los extraños signos que aparecen en el pergamino, éste es el siguiente (en la novela sólo aparecen los primeros):
Guillermo de Baskerville enseguida se da cuenta de que se está utilizando un alfabeto con los signos del zodiaco y de los planetas, pero no sabe exactamente la correspondencia entre los signos de éste y los caracteres del alfabeto del lenguaje natural en el que se escribió el mensaje a codificar, lo que le permitiría obtener el texto decodificado.Finalmente, tras unas pocas horas, Guillermo de Baskerville consigue decodificar el mensaje: sospecha, sin duda y debido a otras circunstancias, que el autor del mensaje ha codificado la clave para entrar en el 'Finis Africae', una zona secreta de la biblioteca en la que se ocultan libros que el bibliotecario estima peligrosos para la fe cristiana, y se le ocurre realizar un ataque de texto claro conocido ('known plaintext attack'), es decir, "formular hipótesis sobre cuáles podrían ser las primeras palabras del mensaje, y después ver si la regla que de allí se infiere vale para el resto del texto", y como texto probable ('crib') se le ocurre que las tres primeras palabras del mensaje decodificado bien podrían ser: 'SECRETUM FINIS AFRICAE'.
A partir de aquí y si las deducciones de Guillermo de Baskerville sobre las tres primeras palabras del mensaje codificado y sobre el alfabeto utilizado, doce signos zodiacales y ocho signos correspondientes a: la tierra, la luna, el sol y el resto de los otros cinco planetas (Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno), que se asociarían a las letras del alfabeto latino, son correctas, creo que hasta yo hubiera sido capaz de decodificarlo:
Con lo que parece claro que en el alfabeto de signos primero se colocan los de los planetas conforme a una visión geocéntrica (Tierra, Luna, Mercurio, Venus, Sol, Marte, Júpiter y Saturno) y después los del zodiaco según su secuencia tradicional (Aries, Tauro, Géminis, Cáncer, Leo, Virgo, Libra, Escorpio, Sagitario, Capricornio, Acuario y Piscis).
Y una vez establecida la correspondencia entre los signos y los caracteres del Latín, el resto del mensaje es muy fácil de decodificar:
'SECRETUM FINIS AFRICAE MANUS SUPRA IDOLUM AGE PRIMUM ET SEPTIMUM DE
QUATUOR'
Lo que supongo que traducido al español, por lo visto en la novela y con ayuda del traductor, quiere decir algo así como:
SECRETO FINIS AFRICAE LA MANO SOBRE EL ÍDOLO OPERA SOBRE EL PRIMERO Y EL
SÉPTIMO DE CUATRO
¿Les sirvió de algo decodificar el mensaje? Sinceramente, a mí no me hubiera servido de nada, ahora había que interpretar correctamente lo que dice el texto en latín, y a ellos no lo sé :), como digo tengo pendiente volver a ver la película y leer otra vez la novela.
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